Con esta tarta fué sorprendida Lydia el día de su graduación, regalo de sus padres, es una tarta sencilla pero muy bonita. A ver que os parece:
Algo tan característico como unos auriculares y la alcachofa, osea el micrófono. Es un bizcocho de vainilla bañado en almíbar de canela con un poco de ron y relleno de ganaché de chocolate negro, la cubierta de fondant Kelmy.
Espero que os haya gustado, y a Lydia también, Feliz Verano!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario